Unos 270 barcos pasan cada semana por el Canal de Panamá, pero ninguno es más antiguo ni tiene tantos secretos como el centenario 'Isla Morada', usado por el mafioso estadounidense Al Capone para el contrabando de licor a inicios del siglo XX.
Durante el recorrido, que cuesta 165 dólares el total de los 80 km y 115 dólares la mitad de la vía, los turistas fotografían cuanta embarcación o ave divisan. En las esclusas de Miraflores nadie quiere perderse la foto con la gigantesca estructura a sus espaldas. La brisa marina, una exuberante vegetación y los rastros de las obras de ampliación del Canal -por donde ha pasado más de un millón de barcos desde que fue inaugurado en 1914-, reciben a los turistas.
De 94 toneladas de peso y 96 metros de eslora, el 'Isla Morada', una embarcación de madera fabricada en la costa este de Estados Unidos, comenzó a navegar en marzo de 1912 bajo el nombre de 'Santana'. Tenía cinco recámaras de lujo, un fastuoso comedor revestido de caoba, una biblioteca y acogía a una tripulación de siete marineros, cuando fue adquirida por Alphonse Gabriel Capone (1899-1947), el famoso Al Capone. Este estadounidense de origen italiano fue el gánster más sanguinario de Chicago en los años 1920, al librar guerra sin cuartel con otras mafias por el tráfico de licor, prohibido entonces por la Ley Seca.
"Fue usado para contrabandear ron y whisky desde República Dominicana y Cuba a una Isla en Cayo Hueso (Florida, sureste de Estados Unidos) cuya arena era púrpura, de ahí su nuevo nombre: 'Isla Morada'. Ningún otro barco ha pasado tanto por el Canal. Es el más antiguo que pasa semanalmente", explica Juan Carlos Villareal.
Tras ser decomisado al caer Al Capone, el barco fue usado por la marina estadounidense en la Segunda Guerra Mundial; llegó en los años 1960 a Panamá, sirvió de hotel flotante para pesca deportiva y luego en rutas locales, hasta que fue adquirido por la empresa Canal and Bay Tours, que lo opera de tres a cuatro veces por semana.
El barco tiene tres pisos. En el primero, cuadros, lámparas de pared y unas mesas de madera decoran un rústico restaurante; en cubierta están las sillas, y en el tercero el material de salvamento y una pequeña cabina de mandos.
Según los promotores, estrellas de Hollywood, como Steve McQueen, John Wayne, Errol Flynn y James Garner, también disfrutaron en algún momento de la embarcación.
Fuente: AFP