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Todos hablan en España del temido corralito

A pesar de las desmentidas, crece la preocupación por los ahorros.


MADRID.- Lo negó el ministro de Economía, lo negó el ministro de Hacienda, lo negaron la mayoría de los analistas económicos y hasta lo tuvo que negar el propio presidente, Mariano Rajoy. Todos los que en España cuentan con una cuota importante de poder y responsabilidad se tomaron el trabajo, en los últimos días, de intentar espantar el temido fantasma de un "corralito" bancario, vaticinado por el premio Nobel Paul Krugman y reforzado por reiteradas versiones sobre fugas masivas de depósitos, especialmente después de la nacionalización de Bankia.

Pero el dramático pedido de una ciudadana anónima a uno de los colaboradores de Mariano Rajoy, capturado in fraganti por las cámaras de televisión, parece tener más fuerza en el ánimo de los españoles que todas las desmentidas oficiales.

"Vengo trabajando desde los 13 años y como me quiten mis ahorros, mato", le dijo esa clienta de Bankia al ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, al sorprenderlo en plena calle. Y aunque el funcionario intentó tranquilizarla con frases y argumentos que buscaron ser contundentes, el miedo a perder los depósitos, expuesto ante la sociedad como nunca antes, pegó primero.

En la capital española, los comentarios y las especulaciones sobre un escenario que parecía confinado al recuerdo de la Argentina de fines de 2001, poco a poco, comienzan a emerger. El gran temor es que pase a integrar la cadena de realidades duras integrada por un nivel del desempleo cercano al 24%, una economía paralizada y un sistema financiero siempre al borde de necesitar un rescate externo.

"Pues claro que esta situación me pone nerviosa, pero no sé qué hacer. Me parece absurdo lo que está pasando, es lo que nos falta después de vivir temiendo a quedar en el paro [desempleo]. Pero también resulta ridículo pensar en sacar los ahorros del banco. ¿Qué tengo que hacer luego, meterlos debajo de un colchón, o de una media, como hacía mi abuelito con las pesetas que ganaba? Es disparatado, pero a esto estamos llegando", dice a LA NACION Gema Otegui, una recepcionista que trabaja en las afueras de Madrid.

A Marcos González, técnico en informática, tampoco lo tranquiliza que el Fondo de Garantía de Depósitos de Entidades de Crédito, creado en octubre del año pasado, proteja los depósitos de los ahorristas "hasta los 100.000 euros".

Una suma que, como muchos jóvenes españoles, González apenas sueña tener algún día en el banco. "Reconozco que me asusta pensar en una situación como la que le tocó vivir a la Argentina. En lo personal, pienso esperar un poco más antes de sacar mis ahorros, porque parece que el problema es de Bankia, y no de todos los demás. Pero esta crisis cada día nos enseña algo nuevo? y, sobre todo, a estar alerta", comenta.

En cambio, el productor radial Rodrigo Vivar cree que debe mantener una actitud prudente. "En principio, no voy a sacar mis ahorros del banco. Tengo mi dinero allí y creo que están seguros. Pienso que éstos son momentos difíciles, que hay que pasar, pero no me parece que lleguemos a ese extremo", dice.

Entre quienes deben convivir con las inquietudes diarias de los ahorristas, las sensaciones suelen ser encontradas. Un empleado administrativo de uno de los tres grandes bancos españoles, que prefirió mantener su identidad bajo reserva, confió a LA NACION que en los últimos días recibió más consultas de lo habitual para movilizar fondos, luego del masivo retiro de depósitos de Bankia. "Hay una sensación de histeria, sí, aunque no contra todos los bancos, sino a cuento de lo que pasó con Bankia. Algunos vienen aquí porque confían en esta entidad, pero es cierto que hacen cada vez más preguntas sobre las garantías que podemos darles por su dinero", confía la fuente.

El economista Jesús Arroyo Fernández, autor del popular blog "Diario de la quiebra (de España)", afirma que recibe a diario "una verdadera avalancha" de consultas de clientes de diferentes bancos para saber qué hacer con sus ahorros. Y esto, en su opinión, ya es una muestra del difícil escenario actual. "El mero hecho de que pregunten ya muestra una preocupante falta de confianza. Lo más importante en la relación banco-cliente es la confianza, y cuando ésta se pierde, resulta muy difícil recuperarla", observa.

Además, el especialista -que ve "muy desorientados" a los ciudadanos por la información "poco convincente" proporcionada por los bancos y los organismos oficiales- no descarta la posibilidad de que se instaure un corralito bancario. "Lo único que podemos decir es que esperamos que no se produzca. Porque, si se llevara a cabo, sería un desastre similar al que se produjo en la Argentina. Y, sobre todo, porque al final, como sucede siempre, lo sufrirían los ciudadanos, que llevan pasándolo mal mucho tiempo", señala.

En tanto, José Ramón Pin, profesor de Economía de la prestigiosa Escuela de Negocios IESE, adjudica la pérdida de confianza y las dudas de los ahorristas a la acción de "especuladores y fondos de inversión", a los que "les interesa crear perturbaciones a corto plazo", para aprovechar los beneficios resultantes. Por esa razón, cree que el problema se limita a Bankia, y descarta que se imponga una medida para restringir el acceso a los depósitos de los clientes de los bancos.

"En Europa no puede haber un corralito bancario. Si se produjera un colapso de la banca española, el choque sería amortiguado por la asistencia del Banco Central Europeo", afirma.

Además, Pin sostiene que no hay "ninguna razón" para aconsejarles a los ahorristas que retiren su dinero de los bancos. Ni siquiera de Bankia. "Era lógica la fuga de confianza que iba a sufrir ese banco, luego de ser nacionalizado. Pero el banco es más seguro ahora que antes, porque tiene dos cosas importantes: gente capaz a cargo y un millón de clientes, lo que le da una solidez impresionante", concluye el académico.

Fuente: La Nación